Campillo 57, es el regalo perfecto
Realmente no hacen falta excusas. Cuando se prueba nuestra memoria gustativa retiene los detalles de este vino maravilloso. Por eso, si tenemos una ocasión especial, una cena exclusiva o queremos hacer un regalo que llegue al corazón a un amante del buen vino, la ocasión la pintan calva.
Hay vinos que siempre nos harán quedar bien y uno de ellos es nuestro querido y exclusivo Campillo 57. Aquí tenéis 5 razones por las que regalar Campillo 57 es éxito asegurado. El año 1957 pasaron cosas fabulosas, se lanzó al espacio el Sputnik 1. Se fabricó el primer frisbee. Se empezó a vender el Seat 600. Se inaugura el Camp Nou y La Romareda. Se firma el Tratado de Roma, y nace el primer hijo de la cuarta generación de la familia Faustino, José Miguel Martínez Zabala. Por esta razón Campillo 57 es un claro homenaje a su figura.
1.- SU DESCORCHE
Campillo 57 es un vino especial, elegante y que, aún siendo un gran reserva, el gusto a fruta es tremendo. Se descorcha y no huele ha cerrado. Al primer descorche la primera impresión es la de estar abriendo un vino vivo y lleno de emoción. En nariz, se nos disparan las emociones.
2.- SU TIERRA
Tiene su origen en el viñedo de la familia que hay en las laderas de Sierra Cantabria y en la finca Villa Lucía. Desde 1984 llevan plantando sus viñedos a una altura de 650 metros, casi la altura máxima de viñedo para la D.O.Ca Rioja que está en 700 metros. De esta manera han sido los pioneros en tener viñedos a mayor altura, una acción que sirve como defensa ante el aumento de temperaturas por el cambio climático y así salvaguardar las cualidades de sus uvas.
3.- SU COUPAGE
Tempranillo, Graciano y Cabernet Sauvignon. Incluir en este coupage la Cabernet Sauvignon fue otra apuesta de Bodegas Campillo que en los años 90 plantó esta variedad que se incluía como experimental en Rioja. La apuesta ha sido un éxito, que convierte este vino en un clásico moderno.
4.- SU MODERNIDAD
Campillo 57 es un gran reserva con un corte muy moderno. Mucho más afrutado que otros grandes reservas, con más intensidad en su color de matices picota junto al carácter de la barrica francesa. Es intenso y equilibrado a la vez. La Graciano y la Cabernet Sauvignon le dan modernidad y la Tempranillo su clasicismo. Su etiqueta también es un reflejo de esa emoción…
5.- SU VALENTÍA
Campillo 57 es el homenaje a la valentía, a los retos, a los sueños cumplidos. Empleando toda la sabiduría de sus generaciones anteriores, este vino apuesta por lo más novedoso, y el resultado es sencillamente un vino fuera de lo común.