Llega la temporada de setas. Todos los seteros están en la pole esperando que, después de estas ansiadas lluvias, salgan unos rayos de sol para que empiecen a asomar la carita los hongos del bosque.
Al vino y a las setas les une la tierra y la cantidad de aromas y sabores que encierran cada uno de ellos. Por esta razón, los hongos y los vinos son más que buenos compañeros. Así que vamos a buscar setas para maridar con nuestros vinos, y qué mejor que encontrarlas bien cerca de nuestras bodegas.
GUMIEL DE IZAN Y TIERRAS CERCANAS.
Algunas zonas de Burgos son un paraíso para el boletus edulis, el gran codiciado de entre los hongos. El sombrero del Boletus puede medir desde 6 hasta 25 centímetros de diámetro y son espectaculares cuando logras encontrarlos entre la hojarasca.
Los boletus son característicos por su cutícula lisa, untuosa y húmeda. Los colores pueden variar según el tipo: ocre, marrón leonado, crema, marrón rojizo y con algunas partes blanquecinas.
Las setas y hongos son reconocidas por su margen espeso, excedente y con una línea marcada de tono blanquecino. En Gumiel se puede combinar una visita a Bodegas Portia con una excursión por el Portillo o por las ruinas de las Ermitas cercanas al Punto de El Lobo. Si bajamos más al sur hacia las orillas del Duero también, podemos encontrar setas de chopo, de cardo y unas de mis favoritas, las setas de pie azul o borracha. A la plancha con un suave salteado y uno de los tintos de Portia el éxito está garantizado.
OYON Y LA SIERRA DE LA CEBOLLERA
Hay que cruzar el Ebro, subiendo hacia Logroño encontramos otro de los sitios tocado por los dioses para sacar a lucir nuestra nueva cesta y nuestra navaja setera. Merece la pena subir por las 13 Villas camino de la Sierra de la Cebollera. Este parque natural tiene zonas reguladas donde se pueden recoger setas. Los permisos de recolección se gestionan a través de MicoCebollera y se puede recorrer tanto a pie como en vehículo. Los boletus aquí crecen como si no hubiera un mañana pero hay que tener en cuenta que no está permitido coger más de 6 kilos por persona y día.
Con una botella de Marques de Vitoria Reserva y la tranquilidad de algunas chacinas riojanas, tenemos un perfecto día de campo. Caminata, manta y paciencia con elementos para poder disfrutar de esos espacios maravillosos en Los Cameros, ya sea el nuevo o el viejo. Villoslada y Lumbreras tienen zonas muy interesantes.
LAGUARDIA Y GORBEA
Y seguimos camino hacia el norte y llegamos a Álava. Cerca de Laguardia, en la frontera entre Álava y Vizcaya está el parque natural de Gorbea. Es el paraíso setero de los vascos. El bosque por sí solo es un espectáculo de la naturaleza, las hayas y los robles envueltos en musgo y la paleta cromática del otoño merecen la pena, aunque no pillemos ni una seta. Pero no va a ser el caso. Los boletus edulis aquí parecen del mismo Bilbao. Dicen que en el hayedo de Altube, en las zonas no acotadas, no hace falta pedir permisos, pero no se puede coger más de dos kilos por persona y día. Ojo! Si no conocemos la zona debemos contar con un guía, porque es una zona muy traicionera y es fácil perderse.
Si merecemos un premio, siempre podemos abrir una botella de Campillo Reserva y decir que conocemos muy bien el Parque de Izki, a 30 kilómetros de Vitoria. Sólo para iniciados.
