Vinos para carnes frías

//Vinos para carnes frías

Vinos para carnes frías

Perfectas para recibir en verano…

Tenemos tendencia a consumir los platos preparados con carne en caliente. Tal vez resulte más apetitoso un guisote de patatas con carne o una pierna de cordero caliente pero en la mayoría de los casos no hay por qué mantener la tradición. De hecho la mayoría de las carnes pueden ser consumidas frías una vez preparadas o cocinadas.

En verano, cuando el calor aprieta, vale la pena entregarse a esta manera de consumir proteínas sustanciosas sin la necesidad de quemarnos la lengua por el calor. Un detalle a tener en cuenta y que sirve para diferentes preparaciones es que la carne fría efectivamente resulta más dura.

Hay dos posibles soluciones a este pequeño inconveniente. Una es cocinar la carne un poco más de lo que haríamos normalmente. Otra es recurrir al viejo truco de cortar la carne en finas lochas, según el modelo del carpaccio o el jamón. Sólo hay que combinar con una buena ensalada, un trozo de pan bueno y una botella de vino de calidad. La comida estará resuelta con matrícula de honor. Además evita ese extraño momento de no saber qué hacer con los invitados, mientras cocinamos…. Lo frio resiste mejor el tiempo de espera!


Filete empanado.

Vinos para carnes fríasUn clásico de toda la vida. Hubo un tiempo, cuando a las tarteras todavía se las llamaba tarteras y eran metálicas, en que el filete empanado era (junto a la tortilla de patata) la comida estándar de las excursiones, ya fueran al monte, al río o a la ermita del pueblo.

Se pasa el filete por harina, huevo batido y pan rallado y se fríe. La carne se conserva muy bien y se puede consumir en cualquier momento. Aunque es perfecta para consumir sobre un mantel de cuadros en una pradera junto a un arroyo cantarín, también se puede consumir en casa. Qué delicia llegar a casa de la oficina y encontrarse una montaña de filetes empanados listos para devorar con una botella de Marqués de Valcarlos rosado, tan fresco y equilibrado que nos daremos besos a nosotros mismos… Si por forma, tamaño o estilo lo convertimos en un “Wiener Schnitzel” tenemos un escalope centroeuropeo que es una opción muy apetitosa para cualquier momento junto a la piscina…


Rostbif (o roastbeef)

Vinos para carnes fríasEl rostbif, como su nombre indica en inglés, es carne de vaca asada. Para que resulte bueno y sustancioso no vale cualquier pieza, tiene que ser de las llamadas nobles. Se puede preparar de diferentes maneras pero la fundamental consiste en dorar la pieza en una sartén para sellar el exterior y luego asarla a fuego suave.

Cada cocinero tiene su propio estilo. Hay quien prefiere que el interior quede de suave color rosado y otros prefieren que quede más hecha. Aunque la hayamos sellado para que los jugos queden en el interior siempre quedará un caldillo que se utilizará para hacer una salsa. Habitualmente se sirve con algún tipo de compota de fruta para dar un contraste apetitoso al plato. Como ya se ha sugerido, se sirve en lonchas finas y, si es con un Portia Summa el placer está asegurado.


Carne de cocido

Una de las delicias de la vida es comer la carne del cocido del día anterior con algún tipo de añadido que aporte gracia. Imaginemos que tenemos unos trozos de carne de morcillo pero también de pechuga de gallina, un trocito de tocino, una punta de jamón y unas rodajas de chorizo que han sobrado. Solo pensarlo transmite energía!

Una opción es añadirlo todo, bien troceado, a una salsa de tomate y cebolla y dejarlo reposar hasta que llegue el hambre. Y si ya lo tomamos con un Faustino Art Collection V2, con aromas florales y notas tostadas vamos a celebrar que estamos vivos.


Empanada de carne

Vinos para carnes fríasTomamos una masa, a ser posible casera, y hacemos una mezcla sustanciosa de carne de cerdo o de pollo troceada y mezclada con un sofrito de cebolla y pimiento más setas y cualquier otro ingrediente, luego cubrimos con la segunda mitad de la masa, sellamos los bordes y al horno. El esfuerzo de su preparación se verá compensado por el disfrute al comerlo horas después, cuando haya enfriado y tengamos apetito de cosas ricas. Sólo queda tener una botella de Campillo Rosé bien fría para empezar a disfrutar de la fiesta que nos hemos organizado nosotros mismos.


Jamón, chorizo, salchichón…

Vinos para carnes fríasNo hay que complicarse la vida. Tenemos a nuestra disposición carne buena y sabrosa ya preparada. Si hay maestros que saben curar un jamón bueno no vamos ahora a hacer su trabajo, basta con ir a la tienda y decirle al charcutero que nos ponga un poco de jamón, un poco de chorizo, un poco de morcón, un poco de caña de lomo, en fin, lo que más nos guste a nosotros y a nuestros seres queridos. Luego sólo hay que prepararlo todo de manera elegante en unas bandejas, abrir una botella de Marqués de Vitoria Crianza tan limpio y brillante que nos parecerá estar en una fiesta sorpresa.