El dibujo de las emociones enológicas.
El vino forma parte de la vida, está claro… y del arte también. En todas sus manifestaciones, pintura, literatura, escultura, cine… a lo largo de los siglos el vino ha sido inspiración y objeto de deseo entre los muchos artistas que a él se han entregado.
El comic y su variante actual, la novela gráfica, también se han rendido al influjo del vino. El comic por tradición siempre ha cumplido una función de diversión, de crítica social, de divulgación… y todo siempre bajo el prisma del buen humor.
Muchas son las obras que recogen tramas entre viñedos, historias divulgativas del mundo del vino, incluso manuales surrealistas de como catalogar los distintos tipos de vino. Personajes como Tintin, Asterix o Mortadelo y Filemón también han recogido en sus viñetas momentos gloriosos con el elixir de Baco o la vendimia.
Una de las muestras más deliciosas de esta simbiosis de vino y comics es el libro de Étienne Davodeau “Los ignorantes”. En Los ignorantes Davodeau apuesta a que hay tantas formas de hacer un vino como de producir un libro. Él no tenía ni idea de vinos y Richard Leroy, su partener y viticultor, tampoco sabía nada de comics. Pero los dos se entusiasmaron con este proyecto. Étienne se fue durante un año a dibujar a los viñedos de Richard, donde abrieron muchas botellas y leyeron muchos comics. El resultado fue un relato lleno de felicidad, disfrute y buenos dibujos.
Para los que les guste el manga japonés, los hermanos Tadashi Agi y Shu Okimoto tienen una serie de comics dedicado al mundo del vino Drops of God. Esta serie manga se publicó en 2004 y terminó en 2014. El protagonista, a la muerte de su padre, debe viajar y conocer la extensa colección de vinos que su progenitor poseía. Los primeros, los 12 apóstoles, los mejores reservas del mundo. Este es el punto de partida de esta serie que por fin se tradujo al inglés en 2020.
Pero si hay una obra cumbre que une vino y comic, esa es “La increíble historia del vino”, de Benoist Simmat y Daniel Casanave. Más que un comic es una enciclopedia del vino a punta de lápiz. Baco se transforma en un hípster de barba larga y camisa de cuadros y nos cuenta la historia del vino desde hace 10.000 años hasta nuestros días.
Una obra muy bien documentada que se antoja leerla trago a trago y con una botella descorchada al lado. Es una obra muy interesante, en él podemos aprender desde las tradiciones vitivinícolas de la antigua Grecia y Roma hasta la osada afirmación de que el champagne es un invento inglés.
Otra manera de conocer vino y comic a la vez es el divertido comic de Jim y Fredman “LÁrt du Vin”. Un tratado de dos “expertos” que lo que más dominan del mundo del vino son las resacas. Ignorantes básicos, pero muy entretenidos.
No un comic al uso pero sí con muchas trazas de parecerlo es el libro que Dalí dedicó a su amada Gala. ”Los vinos de Gala” reeditada hace poco por la editorial Taschen.
Dalí recogió en esta obra una excéntrica y muy personal biblia del vino. “Un verdadero entendido no bebe vino, saborea sus secretos” y eso es lo que nos dibuja y explica el artista en este libro.
Los Vinos de Gala es una guía multisensorial para probar y sentir el vino. En él se recogen las principales regiones vinícolas y sus vinos más famosos, y también una cata muy especial en la que lo que impera es la experiencia emocional y no tanto la gustativa.
Los vinos de gozo, púrpura, los vinos de esteta, de aurora, los frívolos… esta es la peculiar clasificación que el pintor surrealista creó y dibujó para Los Vinos de Gala.
