La vida tiene sus tiempos.
Llegó el verano y, además de hacer el cambio de armario, también hacemos cambio de gustos. Llega el momento de dar rienda suelta a los blancos, fríos, frescos y refrescantes. Una apuesta segura para los tardeos estivales, y para todo lo que se nos ocurra.
Los blancos maridan muy bien con las comidas ligeras y veraniegas. Pastas, arroces, pescados, ensaladas, cremas frías… todas ellas se enriquecen con una copa de vino en la mano. Los blancos también maridan con los buenos amigos y las personas positivas. Eso marca la diferencia.
En Bodegas Familia Martínez Zabala tenemos grandes blancos, todos ellos criados con el mimo y el rigor que nos caracteriza. Por todo esto, os proponemos una lista de nuestros blancos para hacer acopio para el veranito y disfrutarlos sin calendario.
- Empezamos por un must. Es imprescindible hacerse con un Campillo Blanco fermentado en barrica. Tener una caja de reserva para esas parrilladas y fondues veraniegas es un seguro para las reuniones.
- Faustino Art Collection Viura-Chardonnay. La frescura y los toques herbáceos de este vino son perfectos para combinar con altas temperaturas. Cualquier plato de pasta con hierbas aromáticas, tipo albahaca u orégano son ideales para abrir una botella de este magnífico viura-chardonnay. Los pestos sicilianos son una debilidad.
- No puede faltar en nuestra lista un verdejo. Portia Verdejo con sus toques de melocotón y cítricos es el aperitivo más refrescante para los días de sol y playa. Una opción castellana para disfrutar con la arena en los talones de las maravillas locales.
- Y vamos con otro chardonnay. Marqués de Valcarlos Chardonnay fermentado en barrica. Este toque algo más intenso lo hace perfecto para pescados y mariscos. Un espeto de sardinas o un atún a la plancha tienen otro estímulo cuando tenemos enfrente una copa de este maravilloso vino.
- Ahora le toca el turno a la viura. Marqués de Vitoria Blanco, con sus aromas de pera y manzana, son el compañero ideal de los arroces. Es un capricho que salta con alegría entre gambas, mejillones, pollo o alcachofas… Un estimulo también para el cocinero que prepara el arroz en una reunión familiar.
- Y de La Rioja nos vamos a La Mancha. Un vino para diario maravilloso es el Leganza Verdejo. Para esos almuerzos frugales al subir de la piscina y antes de la siesta, el Leganza Verdejo nos puede dar muchas satisfacciones en esas tardes eternas, cuando el termómetro no quiere bajar. Así es el verano manchego, intenso y con carácter.
- Y para terminar, no nos puede faltar un Fortius Chardonnay, con sus reflejos dorados, para una parrillada de verduras. La opción de una barbacoa con horario de merienda-cena y que se prolonga en una buena tabla de quesos del Pirineo tiene en este vino un buen aliado.
- No podemos dejar pasar la oportunidad de recomendaros nuestro Pack Al Fresco Descubrimiento, un estuche perfecto para regalar y/o llevar a esa quedada con amigos y familiares.