Familia Martínez Zabala vive por y para la tierra y el viñedo. Una familia con más de 160 años de historia en el mundo del vino, que toma un nuevo rumbo, esta vez de la mano de mujeres. Carmen y Lourdes Martínez Zabala, cuarta generación de la familia, estrenan marca corporativa. Nueva marca, misma pasión, arraigo y buen hacer. Los valores de una familia que se convierten en vino cada añada.
Hablar de Familia Martínez Zabala es hablar del vino en España. Cuatro generaciones dedicadas en cuerpo y alma al viñedo que, con su visión de futuro, tradición e innovación han llevado a este grupo bodeguero a los primeros puestos del ranking mundial.
Carmen y Lourdes Martínez Zabala son esa cuarta generación que lleva más de veinte años trabajando con la misma pasión que sus generaciones anteriores para mantener el legado de la familia. Un trabajo que equilibra la herencia recibida y la visión de futuro, en una carrera permanente hacia la excelencia y la sostenibilidad.
Más de 140 países con presencia de nuestros vinos, con Faustino I Gran Reserva como su vino más reconocido internacionalmente. Un 30 por ciento de las ventas mundiales de Gran Reserva Rioja, son para este magnífico vino.
Poseer la mayor extensión de viñedo, 2.200 hectáreas, siendo los mayores propietarios de viñedo en la D.O.Ca Rioja, les permite garantizar el mejor trato a la tierra, y la mayor calidad de proceso y vinos. Cuidar la tierra es la mejor manera de mirar hacia el futuro.
Ahora, este grupo bodeguero inaugura nueva Marca Corporativa, Familia Martínez Zabala. Una nueva imagen que realza sus valores: viñedo, familia, sostenibilidad e innovación.
Una imagen que atesora el viñedo y su tierra como la joya que es, el respeto por la tradición y la visión de un futuro que se vislumbra más que prometedor. Familia Martínez Zabala es la nueva marca de un sueño de más de 160 años que, cada día con su pasión materializa esta familia que vive por y para el viñedo.
