Aprende a conducir y disfruta con el vino

//Aprende a conducir y disfruta con el vino

Aprende a conducir y disfruta con el vino

Dos circuitos para ser más seguros.

Alcohol y conducción no son buenos compañeros de viaje. Sin embargo, hacer un curso de conducción y conocer los viñedos y los vinos de algunos puntos de España es una buena opción para el fin de se semana. Saber conducir tiene su técnica, y entender algunos vinos también. Curiosamente, cerca de las Bodegas Portia y la Bodega de Marqués de Valcarlos, hay dos lugares que nos pueden ayudar a sentir la emoción de un circuito. Posible, asequible y seguro.

Aprende a conducir y disfruta con el vino, circuito Kotarr

A unos 10 minutos de Gumiel de Izan, sede de las Bodegas Portia, hay una lugar de referencia para cualquier aficionado al motor. El circuito Kotarr se encuentra en Tubilla del Lago, en la provincia de Burgos, a apenas 18 kilómetros de Aranda de Duero y sólo a 11 de Gumiel de Izán. El circuito, abierto en 2008, es único en Castilla y León. Dar unas vueltas a un circuito al volante de un Porsche, un Ferrari o un Lamborghini es una experiencia que combina muy bien con la gran variedad de oferta turística, cultural y natural de la zona.

El patrimonio histórico y gastronómico de lugares tan conocidos como Aranda de Duero o Lerma, y de otros menos famosos como Gumiel de Izán o Peñaranda de -Duero se completa con la mejor experiencia de enoturismo posible. En el cercano Gumiel de Izán, un verdadero tesoro por descubrir, se encuentran las Bodegas Portia, cuyo edificio es único en el mundo, ya que es la única creación del reputado arquitecto Norman Foster en el mundo de la Enología. Allí se pueden descubrir y apreciar las maravillas que esconde el mundo del vino de la Ribera del Duero, una de las grandes denominaciones de origen europeas.

Aprende a conducir y disfruta con el vino, Bodegas Portia

Algo parecido sucede en Los Arcos, en Navarra. Los Arcos es una de esas poblaciones navarras que prefieren trabajar duro y disfrutar de la vida mejor que alardear de lo que apenas se tiene. Hay pueblos que dejan huella por lo personal y por las “marcas” que deja la historia. Hay que descubrirla para saborearla, en todos los sentidos. Aquí paró Felipe II, en sus colinas se tuvo que refugiar el General Belloc por la hostilidad de los locales frente a las tropas francesas y no faltaron algunos enfrentamientos en la Primera Guerra Carlista…

Aprende a conducir y disfruta con el vino, Bodegas Marqués de Valcarlos

Como buena villa en medio del Camino de Santiago, la historia y el arte se hacen patentes en cada rincón. La calle Mayor siempre ha sido lugar de paso, de peregrinos, viajantes y turistas, y allí se levantaron hospederías, comercios, hospitales y casonas de buena planta que todavía se conservan en parte y dejan ver los recuerdos de otros tiempos.

Aprende a conducir y disfruta con el vino, circuito NavarraLo que es un referente para los peregrinos del Camino de Santiago se convierte en uno de los mejores centros de entrenamiento para aficionados al motor. El Circuito de Navarra, una infraestructura única que permite acoger competiciones de grado 2 D1 en coches y de grado B en motos, además de permitir entrenamientos de Fórmula 1. Un trazado de casi 4.000 metros, con seis curvas a la izquierda y nueve a la derecha que definen un trazado muy apreciado por los pilotos. Dispone también de una pista de karting abierta al público. Y fuera, la plaza de Santa María es punto de encuentro, de disfrute en compañía de bares y restaurantes y algunas de las terrazas más agradables que se puedan imaginar. Aquí el vino se bebe con gusto y las verduras de la Ribera animan al tapeo.