Serie Pueblos Faustino (I)
Autentico territorio Faustino.
Viana, un pueblo con más de 800 años de historia y a tan solo 10 minutos de nuestras Bodegas Faustino. Un paseo mágico por las tierras de La Rioja, de Álava o Navarra nos lleva a descubrir una tierra de frontera, los secretos de los Borgia y una de las etapas más tradicionales del Camino de Santiago.
Planificar una escapada a Viana es un buen plan para estos fines de semana en los que los días van siendo tímidamente más largos. Una ciudad con mucha historia que contar y con unos alrededores que nos dejan atardeceres como el de la Laguna de las Cañas.
Viana vive encaramada en un cerro y contemplando a los miles de peregrinos que cruzan sus murallas cada año, dejando Navarra atrás y entrando en tierras riojanas. A Viana podemos entrar por el Portal de San Felices, por donde los peregrinos abandonan Viana y donde se cuenta que se puso la primera piedra para construir el pueblo. Si a esto unimos el olor a pan recién horneado cuando nos acercamos a la tienda de la Panadería Abadía junto a las ruinas de San Pedro, tenemos el día perfecto.
Viana tiene muchas cosas que ver y que hacer. Aquí os dejamos 10 cosas que hacer en Viana en un día. Para ir abriendo boca.
- Entrar por la puerta de San Felices. Esta puerta de la muralla es donde se puso la primera piedra de la ciudad y donde se impartía justicia en la Edad Media.
- Visitar las ruinas de San Pedro. Esta iglesia está prácticamente derruida. Ver su estructura medio caída y con el rigor del paso de los siglos en sus piedras le otorga una extraña y evocadora belleza. Se construyó en el siglo XII y era una mezcla de edificación defensiva y templo. En el siglo XIX, al ir a reformarla, se cayó prácticamente entera, y así se ha quedado.
- Dar un paseo por la plaza de los Fueros y su Hospital de Peregrinos. Este antiguo hospital, que tenía la función de sanar a los peregrinos que pasaban por aquí, es hoy la Casa de Cultura.
- Buscar la tumba de César Borgia en la portada meridional de la iglesia de Santa María. César Borgia fue generalísimo de los ejércitos de Navarra y Pontificios y murió en Viana el 11 de marzo de 1507. Su cuerpo fue exhumado en varias ocasiones, en el siglo XVI lo sacan de la catedral, lo entierran en la calle Mayor, después en el zaguán del Ayuntamiento y por fin, el hombre descansa a las puertas de la iglesia.
- Descansar en los jardines Joan Manuel Serrat, donde el cantante “aprendió a amar la luz”. Desde aquí se ve una panorámica de la muralla increíble.
- Ir a alguna sidrería a comer tortillas de bacalao y chuletones.
- Endulzarnos con los dulces típicos de Viana. Los bollos de chinchorra, las sobadillas y los cristales.
- Pasear por la laguna de las Cañas. Alrededor de la laguna hay un camino de unos 5 kilómetros, muy fácil de transitar y que nos permite disfrutar de la laguna y de las aves que en ella viven.
- Visitar la ermita de la Virgen de las Cuevas a la salida del pueblo, descansar en su arboleda y beber de la fuente de agua fresca.
- Y por supuesto, no perder la oportunidad de disfrutar de algunos de nuestros vinos más cercanos. Los vinos de Bodegas Valcarlos, Bodegas Faustino y Marqués de Vitoria son muy populares en la zona.
