Un mundo de emociones en Vitoria
Sagartoki es de esos lugares que se hacen imprescindibles cuando se visita la capital del País Vasco. Un local de referencia donde la mezcla buena comida, buenas bebidas, música y ambiente se transforman en el coctel perfecto para disfrutar de un momento perfecto en la bella Vitoria.
Dicen que tienen licencia para gozar, y según se traspasa su puerta empezamos a sentirlo. Las creaciones en miniatura, los pitxos y el continuo ir y venir de gente es la seña de identidad de este lugar de referencia de la gastronomía vitoriana. Hablamos con Raúl Melliz, su jefe de sala y maestro de los cócteles de Sagartoki para que nos dé las claves del éxito del local.
Hay personajes que nacen para un oficio. Raúl creció detrás de una barra, aprendiendo de su padre y ya con 12 años sirvió su primer coctel, y desde entonces su carrera no ha parado de crecer. Todo este bagaje lo aplica ahora en Sagartoki, «una experiencia con los 5 sentidos» que va desde lo visual a lo auditivo, pasando, como no, por el gusto.
Cualquier momento es perfecto para disfrutar de lo que Sagartoki nos ofrece. Su horario de cocina abierta todo el día permite degustar cualquiera de sus especialidades a cualquier hora. El almuerzo, los pintxos, el café, la cena… siempre hay bullicio y buen ambiente en lo que algunos llaman la meca de la tortilla de patata.
Las especialidades de la casa son, por supuesto, la tortilla de patata de Senén, famosa en todo el territorio nacional, y el pintxo de huevo… una lámina deshidratada de patata con huevo de gallina dentro, aderezado con vermú de autor… una delicia auténtica. No hay que dejar atrás los chuletones que sirven, como en toda buena sidrería del norte que se precie.
Y de ahí, nos entregamos a una carta de pintxos tan sugerente como variada. A saber… pintxo moruno con crema de hortalizas, tosta de ibérico con pimiento de Gernika, tosta de pulpo, rulo de calabacín… y esto es solo el principio.
En Sagartoki, la bodega, sus vinos y la coctelería adquieren la misma importancia que los platos. Todo se funde en una experiencia global y de lo más placentero. Los productos del grupo Faustino tienen protagonismo. El secreto mejor guardado de Sagartoki es su continua evolución e investigación en lo que a oferta gastronómica y enológica se refiere y el amor y el cariño hacia la materia prima de calidad.
Le pedimos a Raúl que nos maride 3 de sus especialidades con un buen vino para empezar a hacer apetito, y estas son sus recomendaciones:
- El premiado pintxo de huevo, acompañado de un Campillo blanco F.B.
- La tortilla de patata de Senén, con trufa, y un buen Campillo Crianza.
- Y por último, no podía faltar en esta tierra, una Gilda, con mayúsculas, que se funde con los aromas de un Campillo Rosado bien frío.
Tres delicias maridadas con tres grandes vinos que nos sumergen de lleno en la «Experiencia Sagartoki»
