Faustino en Barcelona

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Faustino en Barcelona

En Barcelona, como en cualquier lugar, la vida vuelve a la normalidad y eso significa que volvemos a hacer lo que más nos gusta: ir a comer fuera. Siempre ha habido que elegir con cuidado pero ahora más que nunca se hace necesario saber dónde vamos a disfrutar de ese momento especial con esa compañía ideal. En Barcelona siempre ha habido mucho y bueno, así que recomendamos tres lugares que ofrecen todas las garantías para hacernos disfrutar de la vida. Unos calamares, un choricitos a la sidra o una hamburguesa, con una copa de vino, nos hacen ver la vida con más optimismo. Recarguemos las pilas.

Quiosc Modern

Nos gustan los lugares en los que una familia, generación tras generación, ofrece buena comida a sus clientes. En el Quiosc Modern del Mercado de la Boquería ya van por la tercera tanda familiar preparando platos sabrosos de todo tipo, pero sobre todo de pescado y marisco. Con ingredientes de primera y ese punto que se consigue al preparar todo en el momento. Muchos se acercan a este puesto en la visita al mercado y aprovechan para picar algo, tipo croquetas de jamón, pimientos de Padrón o huevos rellenos. Otros piden raciones más consistentes como chipirones, pescaditos fritos, calamares o incluso una de callos. Pero para sacar partido al lugar nada como una parrillada de marisco con una buena botella de cualquiera de las referencias de Bodegas Faustino. El mundo bulle a tu alrededor entre los vecinos y los turistas del mercado pero uno es feliz con una buena comida.

 

Bodega Marcel 

El Cloy es uno de esos barrios que combinan tradición y modernez, vecinos de toda la vida y visitantes que se salen un poco de los caminos más trillados. Todos ellos encuentran un lugar para hacer parada en la Bodega Marcel, un local con pocas pretensiones pero, eso, sí, muy buenas: ofrecer una de las mejores propuestas para tomar un vino de toda la ciudad. Por una bodega como la de Marcel matarían muchos restaurantes afamados. Aquí, además, se mantiene una costumbre en vías de extinción, la de ofrecer una tapa con la copa de vino. La oferta de tapas es sencilla pero satisfactoria: chorizo a la sidra, salmón con queso, un poco de fuet y, sobre todo, las gambas saladas y los molusquetes. Una copa de Bodegas Faustino, o dos, nos hacen pensar que hemos encontrado un buen lugar donde regresar otro día.

 

Ovante

La hamburguesa es un gran invento al que un par de cadenas internacionales han hecho mucho daño. Sí, se puede comer una hamburguesa jugosa y deliciosa. Sí, uno se puede sorprender con hamburguesas que nunca antes había imaginado. Sí, se puede comer una hamburguesa tan buena que merece ser acompañada con una copa de vino de primera. Y uno de los lugares para sentir todas esas emociones es Ovante, una hamburguesería premium que, por supuesto, además ofrece algunas otras cosas en su menú. ¿Qué tal una hamburguesa con carne de verdad y además jamón ibérico, champiñones y queso de cabra? ¿O una con tomates confitados, queso emmental, cebolla caramelizada y salsa picante? ¿O una hamburguesa de bacalao con mantequilla de algas? ¿O una hamburguesa con carne de conejo con sanfaina y emmental? ¿O una hamburguesa vegetariana? Lo bueno es que las referencias de Faustino sirven para realzar cualquiera de las que se elijan.

Por | 2020-08-03T07:26:10+00:00 agosto 3rd, 2020|Categorías: Mundo Vino|Etiquetas: |Sin comentarios