Afortunadamente hace tiempo ya que nos dimos cuenta de que el cava no es necesariamente un vino espumoso que sólo se puede consumir en Navidad. Ya no hay complejos de pedir un cava en un restaurante en pleno verano, ni tomarlo acompañando todos los platos, olvidándonos de esa manía absurda de servirlo sólo para los postres.
El cava es como ese amigo que puede ser invitado en cualquier momento. Para la fiesta o para la cena en familia. Donde hay burbuja hay alegría. Es una delicia ser consciente de que el cava marida bien con casi cualquier comida.
No hace falta decir que el caviar y el cava, con esos nombres tan parecidos, forman una combinación ganadora. Pero no es necesario obsesionarse con ello. Un arroz con pescado o con marisco, una lubina a la sal, unas setas a la plancha, unas patatas guisadas, un pollo asado o unos quesos curados mejoran con un buen cava. Y para eso, con los cavas Faustino, hay donde elegir. No es mala idea ir haciendo un pedido a nuestra tienda favorita.
Cava Faustino Brut Reserva
Qué gusto da abrir una botella del brut reserva de Cava Faustino. En la copa muestra esa burbuja fina que tanto nos gusta, correteando por un mar limpio, brillante, de tono amarillo pajizo con destellos dorados. Al acercarlo a la nariz aparecen esas agradables notas florales y frutales.
Este Cava Faustino brut Reserva es fresco y amable, y muy equilibrado, hecho con la mezcla justa de macabeo y chardonnay. Resulta ideal para darse una fiesta uno mismo con muy poco esfuerzo: basta con preparar un surtido de chacinas. Cecina, jamón y lomo de ibérico… Como un premio a nuestra dieta ibérica. Incluso le podemos poner una colección de encurtidos que parecen que vuelven a estar de moda.
Cava Faustino Semi Seco
No hace falta esperar a que sea una fiesta especial para abrir un Cava Faustino Semi Seco. Cualquier ocasión es buena, sólo hay que querer hacerlo. En la copa tiene el aspecto nítido y brillante de un trigal maduro pero en la boca saca su calidez frutal, un dulzor cono de miel. Y con esas burbujas finas que delatan lo bien hecho con uvas macabeo y chardonnay. Marida muy bien con un arroz con marisco, de esos que no quedan ni secos ni caldosos (¡semi secos, como el cava!), preparados con un buen fumet de langostinos. Si tenemos un risotto también podemos triunfar… Frio, y manteniéndolo en frio, toda la comida…
Cava Faustino Extra Seco
Sin complejos! Este producto habría que tenerlo siempre preparado en el frigorífico. Hay un toque de intensidad bien conseguida al acercar la nariz a la copa que acabamos de llenar con un Cava Faustino Extra Seco, un hallazgo complejo que integra muy bien las notas a pan tostado y frutas poco maduras…. Delicioso!
La mezcla de macabeo y chardonnay proporciona un color brillante y, ya en boca, un sabor intenso, bien estructurado y persistente. Cualquier asado de cordero o guisos de carne como un ragou o un roast beef tienen una buen momento para este producto.
Cava Faustino Rosado
Lo primero que llama la atención del Cava Faustino Rosado es su precioso color rojo fresa, realmente limpio y brillante. Hecho con uva 100% garnacha, consigue un marcado perfil frutal, con un olor como de frambuesas. Con la acidez justa y equilibrada, combina con una multitud de platos diferentes. Pato, salmón o chocolate negro…. Todo va bien para el convento de los gustos y las sensaciones.
Sin parecer snob, podríamos decir que vale la pena descorchar un Cava Faustino Rosado sólo por el bonito color. Pero mejor sabrá.
